Descripción
Para esta obra me inspiré en las lagartijas que veo en la montaña sobre las rocas. Si uno intenta atraparlas por la cola, ésta se desprende y así escapan. Las representé girando en círculo engulléndose a sí mismas como una forma de reciclarse. Luego descubrí que resultaba una versión del Ouroboros, un ser mitológico que representa la naturaleza cíclica de las cosas, el eterno retorno y otros conceptos percibidos como ciclos que comienzan de nuevo en cuanto concluyen (véase el mito de Sísifo). En un sentido más general parece ser que simboliza el tiempo y la continuidad de la vida. Se usa el Ouroboros como representación del renacimiento de las cosas que nunca desaparecen, solo cambian eternamente

